Un hombre hispano que ase- sinó a otro residente de
la ciudad de multiples puñaladas y luego intentó
quemar el apartamento de la victima para cubrir su crimen fue
sentenciado a 50 años de prisión en la Corte Superior
de Hartford el pasado viernes.
Uno de los jueces que sentenció a Rafael Fernández
dijo que las muchas puñaladas que le propinó el
acusado a su victima mientras le quitaba la vida hace casi tres
años atrás representan un acto de "absoluta
carnicería". Fernández, de 24 años
fue sentenciado a 50 años en prisión por un panel
de tres jueces luego de haber sido culpado por la muerte de Juan
Montenegro de 38 años y haber intentado quemar el apartamento
de Montenegro en la Sisson Avenue.
Montenegro operaba la Botánica San Lazaro en la calle
Broad y se ganaba la vida ven- diendo figuras religiosas, velas,
incensios, collares y otros artículos relacionados con
la religión que practicaba el hombre natural de Cuba.
La policía encontró el cuerpo de Montenegro, quien
era conocido como "Mercedes", en el sillón de
su residencia el 30 de agosto de 1995. Durante su investigación,
los agentes notaron que el apartamento había sido saqueado,
encontraron una película pornográfica en el VCR
y una sortija de oro ensangrentada en el piso.
Los bomberos que respondieron a una llamada telefónica
encontraron a la victima en el apartamento cuando varios vecinos
reportaron que había humo saliendo del segundo piso del
edificio. El cuerpo de Montenegro mostraba 16 puñaladas
en su espalda, cuatro detrás de la cabeza y tres en el
cuello, según los detalles ofrecidos por las autoridades
después de realizar una autópsia.
Los detectives James Rovella y Luisa St Pierre trabajaron en
el caso por más de dos semanas antes de identificar a
Fernández como el autor de los sangrientos hechos. Los
agentes pudieron arrestar al acusado luego de escuchar el testimonio
de dos testigos que dijeron haber visto a Fernández en
el apartamento de "Mercedes" minutos antes del incendio.
Unos de los testigos dijo a la policía que había
estado en el apartamento de Montenegro minutos antes de llegar
el convicto y que la victima le había indicado que estaba
esperando a un "visitante". La policía descubrió
también que Fernández había sido tratado
en el Hospital St. Francis por una laceración en un dedo
y que había dicho a los doctores que se "cortó
picando cebollas".
Al ser interrogado por los agentes, el convicto cambió
su historia y dijo que las heridas fueron el resultado de un
asalto ocurrido en la calle Liberty y en el cual tres hombres
le atacaron.
La madre de Fernández y su hermano gemelo se encontraban
en la corte cuando el hombre fue sentenciado a pesar que la policía
nunca dió a conocer los motivos que tuvo el hombre para
"picar como pa' pasteles" al cubano.